Focos
El programa de la Cumbre se basará en diversos contextos y sistemas para explorar herramientas para trazar el futuro. Las discusiones tendrán tres focos transversales:
sistemas de conocimiento/saber y agencia;
sistemas participativos y conectividad; y
sistemas y tecnología digitales.
Estos tres focos deben entenderse como una red de temas entrelazados. A lo largo del programa de la Cumbre, se podría hacer hincapié en un grupo u otro; sin embargo, la dimensión de todos los focos será interrogada y considerada en las discusiones y acciones.
Sistemas de conocimiento y del saber
Trazar el futuro es anticipar los acontecimientos y desarrollar formas de adaptación, mitigar los efectos negativos y aprovechar los positivos. Esto es algo que aquellos(as) que conforman las partes interesadas del sector cultural y creativo –incluidos los consejos de las artes, los ministerios de cultura y las agencias culturales– deben hacer mientras navegan por la policrisis. El saber –y sus diversos sistemas– será fundamental para preparar nuestra hoja de ruta para los SCC en el futuro, al igual que las herramientas y los conocimientos que desarrollemos para apoyarlos junto a los entornos en los que operan.
Los sistemas del saber para la cultura son importantes y multifacéticos. Van desde estructuras, procesos y marcos organizados, hasta recursos diseñados para recopilar, gestionar, monitorear, guiar y difundir información, datos, conocimientos y direcciones estratégicas. Además, se apoyan y fortalecen en el análisis, la investigación, la educación y los enfoques interdisciplinarios. Diversos sistemas del saber para la cultura también pueden contribuir a amplificar las voces marginadas y las perspectivas indígenas, creando una representación más inclusiva y equitativa de diversas narrativas culturales, algo clave para garantizar el futuro. Estos sistemas pueden desempeñar un papel crucial a la hora de desafiar y ser clave para descolonizar y remodelar los paradigmas y estructuras de poder dominantes; junto con desarrollar políticas culturales propicias que garanticen un SCC vital y sostenible, que sean diversas, equitativas e inclusivas.
En muchas culturas, el conocimiento es una extensión de la sabiduría. Esto implica que el conocimiento abarca experiencias propias y puede estar entrelazado, incluso inseparable, del ámbito espiritual. Esta última perspectiva va más allá de considerar el conocimiento únicamente como algo adquirido de otros(as). Explorar las culturas de la sabiduría puede ofrecer conocimientos valiosos para comprender de forma más profunda los sistemas del saber.
En la Cumbre: Existen varias escuelas de pensamiento, enfoques y sistemas del saber que nos ayudarán a estar preparados(as) para el futuro. Esto contempla:
Sistemas de conocimiento y saber indígena
incluyendo la relación con la tierra, el medio ambiente y la ascendencia, la cosmovisión,[1] y siendo pioneros(as) en modelos diferentes e innovadores de resolución de problemas tanto digitales como analógicos.Sistemas del saber de las culturas vivas
incluyendo enfoques locales liderados por la comunidad y prácticas culturales de intercambio, diversos sistemas de recopilación de información y formas de abordar los temas sociales.Sistemas educativos y de conocimiento institucional
incluidas instituciones de aprendizaje formales e informales, conocimiento científico y empírico y recopilación de información.
Formatos y enfoques: incorporaremos una variedad de formatos y estilos de talleres que se alineen con los sistemas del saber presentados. Esto incluirá sesiones dirigidas por personas y las comunidades indígenas; discusiones comunitarias; sesiones con participación comunitaria, colaboración y experiencia local; y espacios para expresiones artísticas que reflejen los conocimientos de culturas vivas.
Las intersecciones del intercambio de conocimientos serán clave en las discusiones, incluido el diálogo intercultural, el intercambio de conocimientos intergeneracional y la colaboración de conocimientos interdisciplinarios, interinstitucionales e intersectorial.
Las artes y la cultura pueden cuestionar ideas y crear un entorno rico en el que se prueban diferentes formas de pensar y actuar, mientras imaginamos futuros inclusivos, sostenibles y resilientes para los pueblos y el planeta.[2]
Colectividad, conexión y participación
Para nuestros propósitos, colectividad y conexión significan pertenecer y ser parte de un todo más amplio con un objetivo común.
En la 9ª Cumbre Mundial, los(as) delegados(as) discutieron la deterioro del debate público como un desafío clave y destacaron el papel de las plataformas digitales, las redes sociales, las organizaciones de medios de comunicación y las instituciones artísticas y culturales como guardianes que pueden democratizar y dominar la cultura, y crear entornos opuestos donde las personas sólo encuentran información y creencias que se alinean con las suyas (comúnmente conocidas como cajas de resonancias o echo chambers en inglés).[3]
Este deterioro refleja y refuerza la polarización del debate político y la opinión pública, en aumento en diferentes partes del mundo. Esto se manifiesta cada vez más en el ámbito cultural, donde el arte puede ser atacado simbólicamente o mal utilizado para agendas contrapuestas. Además, dichas plataformas pueden reforzar las narrativas dominantes, haciendo que otras voces estén aún más marginadas e incluso invisibles. Esto sitúa a las plataformas culturales bajo presión de todos lados, lo que puede crear un terreno fértil para la censura (tanto por parte de sus pares como de los(as) propios artistas).
La conectividad y la colectividad también abarcan la relación humana con la ecología; cómo vemos y definimos esta conexión con la naturaleza. No podemos trazar un futuro que no piense más allá del ámbito humano; debemos incluir otras formas de vida y el medio ambiente. Se trata de temas importantes que afectarán la sostenibilidad del ecosistema artístico y cultural, en particular la diversidad de las expresiones culturales. Podemos abordar estos problemas uniéndonos como una comunidad internacional colectiva y conectada.
En la Cumbre: Los sistemas participativos implican el compromiso activo y la colaboración entre un grupo diverso de partes interesadas, lo que permite la toma de decisiones y la resolución de problemas colectivos, la discusión abierta y respetuosa, y el intercambio de conocimientos y experiencia dentro de una comunidad, organización o sector. Los procesos participativos son clave para unir a las personas y crear un entorno colaborativo. Nuestros esfuerzos para trazar el futuro dependerán de garantizar que la resolución de problemas se analice desde una variedad de puntos de vista y se logre trabajando en conjunto.
Este foco incluirá modelos que:
involucren y fomenten la participación activa en la gobernanza de la cultura en todas las etapas del pensamiento futuro. Esto se aplica a cada etapa del proceso de políticas públicas, desde la identificación de una cuestión o problema a abordar, la realización de consultas para obtener una comprensión integral en las diferentes etapas de desarrollo de políticas públicas, hasta la cocreación y colaboración para su implementación y, finalmente, el seguimiento de su progreso.
muestren colaboraciones innovadoras para trazar el futuro que abarcan un amplio espectro –desde iniciativas de políticas públicas hasta esfuerzos liderados por la sociedad civil– y presentarán una amplia gama de ejemplos que utilizan modelos altamente participativos al abordar problemas sistémicos
Formatos y enfoques: utilizaremos formatos que incluyen sesiones de mesa prolongada (long table), sesiones respuesta world café y modelos colectivos de design-thinking, el uso de tecnología para resultados e intercambio en tiempo real, y otros estilos de intercambio altamente participativos.
Tecnología y sistemas digitales
La era digital ha moldeado profundamente el mundo en el que vivimos, cómo lo experimentamos, cómo nos relacionamos unos(as) con otros(as) y, especialmente, en qué confiamos. Además, para los SCC, las tecnologías y herramientas digitales han transformado no solo las prácticas artísticas y culturales, sino toda la cadena de valor cultural: desde la creación hasta la producción, la distribución, el acceso y la participación.
Como exploramos en El Apoyo a la Cultura en la Era Digital (2020), las recientes tecnologías han cambiado radicalmente la forma en que los(as) artistas pueden trabajar, con procesos optimizados y mayores oportunidades para experimentar, colaborar, crear, presentar y encontrar audiencias. Sin embargo, estas oportunidades no se distribuyen de manera uniforme, con una brecha digital que separa a quienes pueden acceder a la infraestructura, las habilidades, el conocimiento y la experiencia necesarios y, a menudo, replica las barreras existentes, incluidas las basadas en el idioma, la discapacidad, la raza y el género. Además, los desafíos que enfrentamos se ven agravados por cuestiones fundamentales relacionadas con la naturaleza de la creación: cuando las obras de arte son generadas por inteligencia artificial o aprendizaje automático, ¿quién posee los derechos? ¿Y cómo podemos evitar que las expresiones culturales vivas y colectivas sean apropiadas y explotadas?
Las nuevas tecnologías también han generado nuevos productos y creado oportunidades para preservar el patrimonio intangible, registrar información, abrir nuevos mercados, adoptar modelos comerciales innovadores y empoderar a los(as) actores/actrices de toda la cadena de valor cultural. Sin embargo, estos también conllevan desafíos. Los abundantes bienes y servicios culturales concentran la oferta de una manera que afecta la diversidad de las expresiones culturales y la capacidad de descubrimiento de contenidos. Muchas organizaciones luchan por adaptarse a nuevos entornos debido a la falta de infraestructura, fondos, tiempo, personal y/o recursos técnicos. ¿Qué formas de educación tenemos y en qué narrativas se basan?
Asimismo, la desconexión entre el sector cultural y los sectores no culturales que impulsan la agenda digital crea un desequilibrio en las habilidades, el conocimiento y el financiamiento necesarios para operar –y competir con modelos de negocio viables– en mercados modificados, con nuevos actores y escalas de actividad y operación. Y existen riesgos asociados con deficiencias en el desarrollo de habilidades, con una falta de conciencia y acceso a datos fiables (y a los sistemas necesarios para analizar y aprovechar dicha información) que obstaculiza la capacidad de los sectores cultural y creativo para llevar a cabo evaluaciones y planificación anticipada.
Además, los rápidos avances tecnológicos en Inteligencia Artificial (IA) –y otras tecnologías avanzadas como la robótica, la computación en la nube y el Internet de las cosas– están transformando disciplinas, economías e industrias, y cuestionando ideas sobre lo que significa ser humano, como lo señala la UNESCO.[4] This has a direct effect on the arts and cultural ecosystem and its stakeholders. This is even more profound for diverse perspectives of younger generations that have been born into the digital era.
Uno de los obstáculos importantes que enfrentan los SCC a la hora de adoptar las nuevas tecnologías, es la percepción de que la era digital representa una realidad que llega "desde fuera" (es decir, desde otro tipo de disciplinas como la ingeniería o la programación) y que, por lo tanto, otros(as) deberían estar a cargo (para que el SCC pueda simplemente escuchar a estos(as) otros(as) actores/actrices). La oportunidad de fomentar un mayor diálogo y romper los silos (trabajo aislado y solo vertical) contribuye a empoderar a los SCC en este entorno digital.
Durante la Cumbre desarrollaremos una comprensión más profunda de estas oportunidades, desafíos e impacto social de la era digital y la filosofía tecnológica,[5] lo que informará nuestras estrategias para preparar una hoja de ruta para los SCC en el futuro.
En la Cumbre: El foco sobre sistemas y tecnología digitales analiza el papel que desempeñan los espacios y la tecnología digitales en nuestros sistemas actuales, desde nuestra capacidad mejorada para recopilar información basada en evidencia hasta la influencia de la desinformación, las redes sociales y otras plataformas de información; y cómo la cadena de valor cultural se ha transformado.
El foco también:
aborda las tecnologías digitales que toda la cultura y el ecosistema creativo realmente requieren, en su contexto, en sus realidades y en sus términos.
considera la recopilación automatizada de inteligencia y el aprendizaje automático, y cómo la tecnología y el espacio digital sirven como espacios creativos para nuevos trabajos y pensamientos innovadores.
examina los desafíos que enfrenta el ecosistema de los SCC al adaptarse a este panorama en rápida evolución, con un enfoque en aprovechar el potencial de la inteligencia artificial (IA) y al mismo tiempo garantizar que los sistemas de información mantengan el conocimiento y las bases basadas en evidencia.
explora el potencial de la IA para nivelar la cancha y equiparnos con las herramientas y capacidades que necesitamos para navegar nuestro camino a largo plazo, así como oportunidades para usar la IA para liberar recursos de la administración y puedan redirigirse a la creatividad y actividades de desarrollo.
resalta la interconexión mostrando el impacto de la tecnología en diferentes dominios. Esto servirá como plataforma para reflexionar sobre debates anteriores e identificar dónde la tecnología ha tenido un impacto significativo (tanto positivo como negativo) o dónde su potencial aún no se ha aprovechado o comprendido plenamente.
Formatos y enfoques: utilizaremos una variedad de formatos digitales interactivos y otros tipos de herramientas colaborativas. Esto puede conducir a una discusión de contenido más espontánea basada en la recopilación de ideas en tiempo real en la sala, mediante el uso de encuestas en vivo, por ejemplo. También puede contemplar la inclusión de modelos híbridos de participación (analógicos y digitales), así como talleres de desarrollo de habilidades, incluida una posible sesión en el metaverso. Al demostrar ejemplos y soluciones reales, podemos inspirar acciones y fomentar la colaboración para lograr resultados significativos.
[1] La cosmovisión se refiere a la concepción que los pueblos indígenas tienen, tanto colectiva como individualmente, del mundo físico y espiritual y del entorno en el que desarrollan su vida y su ascendencia.
[2] http://www.un.org/sustainabledevelopment/development-agenda/.